Es bien sabido que la luz solar ultravioleta es responsable de una cantidad sustancial de daño prematuro a la piel. Sin embargo, basándose en un número cada vez mayor de estudios, la comunidad dermatológica está empezando a descubrir que la protección UVA/UVB puede no ser suficiente en la lucha contra el envejecimiento visible. Hay otro tipo de radiación que podría ser igualmente perjudicial para la piel y se esconde a simple vista.
LUZ VISIBLE DE ALTA ENERGÍA
La luz de alta energía visible (HEV), también llamada luz azul, se encuentra justo al lado de la luz ultravioleta en el espectro electromagnético. Con longitudes de onda que van desde 380 nm a 500 nm, constituye aproximadamente un tercio del espectro de la luz visible.
A diferencia de los rayos ultravioleta, que son invisibles, la luz visible es detectable a simple vista, lo que significa que su piel recibe radiación HEV casi cada vez que cualquier fuente de luz le permite ver su entorno.
DAÑO CELULAR PROFUNDO
La luz HEV penetra aún más en la piel que la luz UV, llegando hasta la hipodermis y el protector solar no puede bloquearla. La ciencia muestra que la exposición concentrada puede generar radicales libres y desencadenar inflamación, lo que en última instancia altera la producción de pigmentos en la piel y perjudica la regulación celular, la curación y la función de barrera.
El resultado más frecuente es la decoloración, incluidas manchas oscuras e hiperpigmentación. Los estudios también han relacionado el VHE con arrugas, pérdida de firmeza, pérdida de elasticidad, sequedad, textura desigual y otros signos visibles de fotoenvejecimiento.
LA LUZ AZUL ESTÁ EN TODAS PARTES
La mayor fuente de luz HEV es, con diferencia, el sol; sin embargo, incluso en interiores y durante la noche, la piel está expuesta. Los teléfonos inteligentes, las computadoras, las luces fluorescentes, los LED, los televisores de pantalla plana y otras luces artificiales son fuentes de luz azul. Aunque estos dispositivos digitales emiten una cantidad mucho menor de HEV que el sol, están mucho más cerca de nuestra cara y, a diferencia del sol, los miramos directamente con frecuencia. Las investigaciones demuestran que en esta era moderna, nuestro nivel de exposición a la luz azul emitida digitalmente puede alcanzar niveles dañinos.
¿Qué significa esto para usted y sus clientes?
El régimen de cuidado de la piel adecuado puede ayudar a proteger contra el fotoenvejecimiento relacionado con los rayos UV y el VHE. Obtenga más información en nuestro próximo artículo, Más que SPF: creación de un régimen completo de cuidado de la piel fotoprotector .